sábado, 18 de mayo de 2013

UNA COPA BIEN VALE 14 AÑOS

Han sido 14 años de infamia, de aguantar como el eterno rival siempre se llevaba el gato al agua, jugando bien, mal, regular daba lo mismo. De ver como los arbitrajes impedían una victoria; de ver como Casillas siempre sacaba una mano milagrosa que evitaba la derrota de su equipo; de ver como los errores defensivos costaban goles imposibles de remontar; de autoconvencerse de que alguna vez la racha se tiene que acabar.... y no se acababa; de una generación de niños y adolescentes atléticos que en su vida habían visto ganar al Madrid. En definitiva,  de ver como, pasara lo que pasara, sabías que al final el Atlético iba a a ser incapaz de ganar al Madrid.
Con todo ese lastre se presentaba el Atlético en el Bernabéu. Un lastre que sin embargo no afectaba a una afición inmune al desaliento, que no sabe lo que es desfallecer. Desde horas antes del partido, la marea rojiblanca teñía de color los alrededores del Bernabéu, los cánticos apagaban los silencios de una tarde gris y los comentarios, todos, sin excepción eran de optimismo convencidos de una victoria como si los antecedentes no contaran, como si una nube extraña hubiera reseteado la memoria de los atléticos, como si la historia de los derbis comenzarán ayer. Una sensación o pensamiento que Simeone inculcó a sus jugadores. Lo anterior no sirve, el futuro ya vendrá y no se sabe como es, lo que importa es el presente y ese presente deciá que era el momento. Así saltó el equipo al campo, donde descubrió un Santiago Bernabéu, con mayoría, por poco, de aficionados rojiblancos que ya habían ganado la final, al menos en lo que animación y cánticos se refiere, ( alrededor mío en la grada, se sentaban aficionados del Madrid, llegados de Canarias para el partido, y no pararon de repetirme durante el encuentro,con cierta envidia,  el gran espectáculo que procedía de la parte colchonera y que ojalá que el madridismo animara así. "Es muy fácil ser aficionado blanco"  me comentaban). Tocaba ahora al equipo, sin embargo pronto se vio que la historia parecía repetirse cruelmente y el Madrid se adelantaba en el marcador. Se acabó la final, pensó medio estadio, se acabó la final pensó Mourinho, se acabó la final pensaron los jugadores blancos, se acabó la final pensaron la inmensa mayoría de periodistas que asistían al estadio. Pero todos ellos, no contaban que enfrente estaba un equipo y una afición harta de perder, un equipo y una afición que sabe sacar su mejor versión en los momentos decisivos (ya lo hizo en las anteriores finales, donde acudía como víctima), un equipo y una afición que sabían que era el día para acabar con la infamia. Y esa fe en sus posibilidades les llevó a remontar el partido y ganar la final. Sí, ganar, ganar, ganar y ganar.
De un plumazo se desvanecieron los 14 años anteriores, es más todos los dieron por buenos, porque si había que vencer en un partido en esos 14 años, era en el de ayer, en el Bernabéu, y en una final, donde más duele.
Podrán pasar otros 14 años sin ganar al Madrid, pero lo de ayer lo compensa todo. Ver la celebración del equipo con su afición tras el partido es algo que se tardará mucho tiempo en olvidar. La celebración dejó momentos inolvidables, pero me faltó uno y que de haber estado allí hubiera representado y no es otro que haber recreado la imagen de Joe Rosenthal, cuando fotografío al ejercito americano alzando la bandera americana (con los mismos colores que la del atlético) en el monte Suribachi tras la batalla de Iwo Jima, un 23 de febrero de 1945. Porque ayer el ejercitó rojiblanco tomó tras una dura batalla el Bernabéu. Aquella batalla de Iwo Jima cambió el rumbo de la historia en la II Guerra Mundial, quizás la final de ayer cambie la historia de los derbis.
Seguiremos informando...

viernes, 17 de mayo de 2013

Y SI LE DA POR GANAR AL ATLETICO ?

Me encuentro a pocas horas de partir hacia el estadio Santiago Bernabéu para presenciar la final de la Copa del rey, si ya sé que al final he caído y he comprado entradas a pesar del precio, con eso juegan los directivos, al final pesa más el corazón que la cabeza. Y lamentablemente voy a presenciar la final desde un lugar muy distinto al que me correspondería de no haber estado en el paro, pero....eso es otra historia ya contada y que no merece la pena volver sobre ella.
Pues lo dicho, quedan pocas horas para la final, esa final que todos, o al menos, la inmensa mayoría, piensa que no va a tener historia, que la va a ganar el Madrid, e incluso que la va a ganar sin dificultad y siendo muy superior al Atlético.
Si nos atenemos a los antecedentes, parece claro, en los últimos 14 años, el Atlético ha sido incapaz de vencer a su eterno rival,  pero ¡cuidado! que no se venda la piel del oso antes de cazarlo, porque si miramos a los antecedentes, también dicen que en las tres finales que el Real Madrid y el Atlético han disputado en el Bernabéu la victoria ha caído del lado rojiblanco. Además, si nos fijamos en el último lustro, el Atlético ha ganado más títulos que el Real Madrid, siendo un especialista en finales. Ha ganado cuatro de cinco títulos posibles, (dos Europa Leagues y dos Supercopas de Europa) perdiendo sólo la final de Barcelona ante el Sevilla, una final que no mereció perder. Mientras que el Madrid "sólo" ha ganado una copa del Rey y un título de liga, por tanto, lo dicho, cuidadito, que a un partido puede pasar de todo.
Bien es cierto, que no pensar que el Madrid es el favorito, es no ser realista, pero al Atlético no le viene mal que todos los focos estén puestos hacia el lado blanco, le gusta ir de víctima para luego sorprender como ha sucedido en las finales ganadas. Sólo en una no iba con el cartel de favorito, fue la primera ante el Fulham inglés y curiosamente fue la que peor la pasó para conseguir el título. Porque ante el Inter, iba de víctima, y se lo merendó vivo, ante el el Athletic se presentaba como segundón, tras la gran competición que hizo el conjunto bilbaíno, y se lo borró del campo, y que decir ante el Chelsea. Era el duelo del dinero contra el corazón, y todos saben como acabó la historia.
Algo parecido puede suceder esta noche. El Madrid lo tiene todo para ganar, juega en su estadio, cuenta con un presupuesto 4 veces mayor que el del Atlético, tiene mejores jugadores, le tiene comida la moral a los colchoneros, son 14 años sin perder ante el rival, pero........ la final hay que jugarla y todo puede pasar. No hay mejor momento para acabar con esa infame racha que esta noche, Simeone lo sabe, los jugadores lo saben y los más de 35.000 aficionados atléticos que acudirán al campo lo esperan, así que cuidado.
Una última cosa, si te sobra algo de dinero, juegatelo a favor del atlético,  puedes dar el pelotazo.
Me voy al campo, que Dios reparta suerte.
Seguiremos informando.....

miércoles, 15 de mayo de 2013

A VUELTAS CON LAS ENTRADAS

Apenas quedan dos días para la final de la Copa del Rey entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid. ¿ Quién levantará el título ?, eso es imposible de saber, aunque las apuestas dan como claro favorito al Madrid, pero lo que sí se sabe, o al menos,  parece claro,  es que el estadio Santiago Bernabéu, no se va a llenar. Algo impensable al principio, ya que los dos equipos tienen masa social suficiente para llenar, no sólo un estadio, sino dos. El motivo de que no se agote el papel, está claro y no es otro que el precio de las entradas. Desorbitado a todos los efectos, sobre todo en estos tiempos de crisis que nos está tocando vivir. Que cuesten entre 60 y 275 euros es una auténtica barbaridad. Los precios los pone la Federación que es la organizadora de la Final, pero debería haber existido una protesta de ambos clubes, exigiendo una rebaja sustancial del precio para sus aficionados, que a la postre son los que sustentan su existencia. Que no se agoten las entradas es la prueba clarificadora del error de la decisión tomada por la Federación. Sin estar en su cabeza, me imagino que el precio se puso en virtud de las circunstancias de los dos equipos, es decir, al ser los dos equipos de la capital, por lo que la gran mayoría de los aficionados no tendrán que desembolsar ningún gasto por el desplazamiento, pués inflamos los precios.
¿ Se arriesgaban con esa medida a que los aficionados no respondireran ? Sabían que no, la Federación no es tonta y sabe y es consciente que el amor a unos colores está por encima del dinero y que, los aficionados son (somos) masoquistas y a pesar del pataleo y de las quejas, se tirarán como locos en busca de una entrada, pagando mucho más de lo que se tenía pensado al principio, como así ha sucedido. Por ello, el estadio no se llenará, pero si registrará una gran entrada, (faltan por venderse las entradas más caras, las que estan por encima de los 200 euros) y cuando comience el duelo, nadie se acordará del precio y sólo se centrarán en que su equipo gane.
Con eso juega la Federación, pero no por ello, me resigno a decirles que se han pasado, que no todo vale y que tenian que haber pensado un poco más en los aficionados que son la salsa del fútbol, y no sólo en sus intereses económicos. Que se fijen en sus vecinos europeos y que aprendan
Seguiremos informando....